CEPILLOS DE DIENTES ECOLÓGICOS/BIOBAMBÚ

“Nuestros cepillos son sostenibles 100% naturales de verdad y certificados”

 para reducir la huella ecológica de nuestro planeta con la honestidad, respeto, responsabilidad hacia las personas, los animales y la naturaleza como bandera. Ahora, laempresa está detrás del primer cepillo de dientes libre de plásticos.

 además de ser ecológicos, también proceden del Comercio Justo. Y ahora, tras mucha investigación, nos anuncian la llegada a Europa del primer cepillo de dientes de bambú sin plástico derivado del petróleo, 100% confeccionado a base de plantas (biobasadas). Y lo más importante: se trata de un producto certificado por organismos independientes, porque para NOSOTRAS la transparencia es lo primero.

-Lo primero de todo… 
hace aproximadamente 5 años, vimos, por primera vez, el primer cepillo de dientes de bambú. Nos sorprendió saber que existía un sustituto natural al cepillo de plástico usado diariamente en todas las partes del mundo y que tanto residuo generaba. Comenzamos a venderlos y rápidamente el mercado se inundó de ellos y fuimos conscientes de que era una solución a medias, ya que sus cerdas, e incluso en ciertas marcas también las cajas, dependían del petróleo, del plástico. Esta realidad nos golpeó de tal forma la moral que teníamos que ponerle remedio y nos propusimos ofrecer a nuestras clientas y clientes una alternativa sostenible 100% natural de verdad. No fue fácil, pero finalmente lo conseguimos.

PUBLICIDADES FALSAS
-Como bien has mencionado, el mercado ya está colmado de cepillos de dientes de bambú, ¿Qué es lo primero que debe saber una persona que se haya propuesto ser más sostenible y quiera comprar uno?
-Si esa persona se preocupa por el medio ambiente y ha decidido cambiar sus hábitos y rutinas para reducir su huella ecológica, lo primero que debe saber es que la mayoría de los cepillos con mango de bambú que encontrará, en cualquier tienda del sector ecológico, supermercado o Amazon, no serán tan eco-friendly como él o ella piense. Tendrá que informarse para elegir muy bien y de acuerdo a su propia condición o propósito como, por ejemplo, que el cepillo sea, además de sostenible, vegano.

¿Por qué es tan difícil encontrar un cepillo de dientes de bambú sostenible?
-Lamentablemente por el llamado GreenWashing o “Lavado Verde”, que se ha acaparado de prácticamente todos los conceptos que sirven para diferenciar un producto ecológico y respetuoso con el medio ambiente de otros que no lo son. La fuerza del marketing impulsado por el poder económico de grandes empresas, que emplean este tipo de desinformación en búsqueda de rentabilidad, dificulta, cada vez más, la posibilidad de encontrar opciones naturales y adoptar un estilo de vida saludable para las personas y el planeta. Nosotras mismas lo vivimos… Cuando comenzamos nuestras investigaciones por diferentes países, encontramos demasiada publicidad falsa y poca transparencia.

LA DIFERENCIA
-Bajo esa premisa, ¿cómo una persona puede saber o distinguir entre un cepillo de nambú sostenible y cero residuos entre tantos que no lo son?
-Para encontrar un cepillo dental Zero Waste o 0 Residuos deberá ir más allá del mango fabricado en bambú. Tendrá que comprobar la composición de las cerdas, si estas son derivadas o no del petróleo; deberá preguntarse cuestiones como ¿dónde se fabrican?, ¿qué organismos les avala? o ¿de qué material esta hecho su envoltorio? Y, sobre todo, llegar a conocer los conceptos que describen el producto y vienen escritos en las cajas como, por ejemplo: ¿Qué es biodegradable? y ¿Qué es compostable? De esa forma sabrán cuándo una marca es transparente y cuándo no.

Nos gustaría profundizar más en esto. En el caso de las cerdas, que es la parte más importante de un cepillo de dientes, ¿qué opciones o tipo de cerdas nos ofrecen los cepillos de dientes de bambú?
-Pues te sorprenderá saber que la gran mayoría de filamentos están elaborados con nylon, material derivado del petróleo, que no ayuda a reducir la huella ecológica o el impacto sobre el cambio climático, sino todo lo contrario. ¡Razón de sobra para comprobar siempre la composición! Por poner algunos ejemplos, están los filamentos con Tynex, al que llaman nylon de alta calidad y al que asocian con una mejor higiene bucal, como excusa; o los más conocidos y falsos sostenibles, el Nylon 4 o 6, sin o con algún ingrediente vegetal como el carbón o el aceite de ricino,  libres de bisfenol A (PBA) pero finalmente plástico obtenido a partir de la industria petroquímica. El problema de estas cerdas es su composición: el plástico. No solo no se degradan por sí solas, sino que tardan varios siglos en descomponerse y, aunque se separen los filamentos del mango, para un correcto reciclaje, cuando llegan al final de su vida útil… tienen una alta probabilidad de acabar en el mar y convertirse en los peligrosos microplásticos.  Por dar algunos datos más, El 79% de los residuos termina en vertederos y en el medio ambiente y, según una información reciente, el 76,1% de la basura que producimos en España es plástica. Actualmente se arrojan al mar 126 toneladas de plástico cada día, a la espera de que salga adelante el Proyecto de Ley de Residuos, previsto para 2023. Y lo que más nos asusta de todo es que ciertas marcas están dando un paso más allá en su guerra comercial justificando que sus productos son plásticos o no veganos porque no hay alternativas, cuando en realidad sí que las hay. Biobambú es la prueba.

LAS CERDAS
– para que quede claro… ¿Por qué las cerdas de nylon 4 o 6 no son sostenibles?
estos nylon están libres de Bisfenol A (PBA) presentes en otros plásticos industriales que en la actualidad, y en concreto en la UE, está limitado su uso o prohibido por completo, en determinados productos y países, al ser catalogado como “sustancia tóxica y preocupante para la salud humana”. Sin embargo, estar libres de PBA, ¡que está muy bien!, no les hace más sostenibles. Son y seguirán siendo plásticos sintéticos obtenidos del petróleo. Ningún cepillo con estas cerdas podría desecharse al contenedor orgánico, al menos, sin separar antes sus cerdas del mango, por lo que si una marca no te advierte de ello no está siendo sincera, ni respetuosa con el medio ambiente.  Entrando un poco en detalle en cada uno de ellos. En el caso del nylon 4, aunque sí se ha estudiado su desarrollo como una poliamida biodegradable y de base biológica, superior al nylon 6, la realidad es que esta fibra en condiciones específicas, de tiempo y temperatura, podría llegar a degradarse entre un 30% y un 80%, que no es lo mismo que compostarse o biodegradarse. Por su parte, el muy publicitado nylon 6 es el más conocido de todos los plásticos técnicos, por sus propiedades y la posibilidad de ser modificado con aditivos, como es el caso de aquellos cepillos cuyas cerdas tienen algún ingrediente vegetal, sin sustituir el plástico de su base. Su fabricación depende del petróleo, por lo que no se le puede considerar un producto sostenible ni 0 Residuos.

-Esto nos lleva a la siguiente pregunta: ¿Existe el nylon vegetal? ¿Cuál es la diferencia entre nylon sintético y las cerdas naturales?
Partiendo de la base de que el nylon es “poliamida sintética”, el nylon vegetal no existe como tal. Lo que no quiere decir que no existan opciones Zero Waste.  Las poliamidas pueden encontrarse en la naturaleza, como la lana y la seda, y también pueden producirse filamentos a partir de materia prima natural, a base de plantas (vegetales) o animal. En este sentido, existen cepillos dentales con cerdas de jabalí o caballo. Opción 100% natural pero NO vegana. Una solución poco razonable si lo que se busca es proteger al entorno y su biodiversidad.

LA DIFERENCIA

NUEVOS CONCEPTOS
-Actualmente se está hablando mucho en el sector sobre dos términos: “Bioplásticos” y “Biobasados”. ¿Qué significa cada uno y cómo se distinguen?
-Los bioplásticos representan actualmente la gran apuesta en la promoción de nuevos materiales y productos compatibles con el medio ambiente e independientes de los combustibles fósiles. En este sentido, y según la Asociación Europea de Bioplásticos  existen productos biobasados procedentes de fuentes renovables (naturales), con las que, en este caso, se podría fabricar las cerdas de un cepillo de dientes 100% natural, sin petróleo ni compuestos químicos; y también bioplásticos obtenidos mediante procesos químicos a partir de fuentes fósiles que son biodegradables en cumplimiento de las normativas de biodegradabilidad y compostabilidad. Conviene aclarar que la mayoría de productos biobasados, procedentes de fuentes renovables, son biodegradables y compostables, aunque no precisan serlo. Mientras que los bioplásticos, que tienen en su origen una fuente fósil, pueden llegar a serlo siempre que cumplan con los criterios científicos recogidos en las normas. Es decir, que se certifiquen como tal.

BAMBÚ, CASI MILAGROSO
-Hablando de madera en cuanto al mango… ¿Por qué el bambú?
A la madera de bambú se la podría considerar como un recurso natural prácticamente ilimitado con la capacidad de salvar ecosistemas. Es una de las plantas más resistentes de nuestro planeta, producen hasta un 30% más de oxígeno que otras plantas, tiene su propio sistema anti-bacteriano natural, por lo que no requiere de pesticidas ni insecticidas para su cultivo y tiene el Récord Mundial Guinness de la planta de más rápido crecimiento. Puede crecer hasta 30 centímetros en un día alcanzando los 18 a 25 metros en pocos meses, mientras que un árbol común tarda 50 años en alcanzar su plenitud. Además, aunque se corten y colecten sus cañas, la planta madre continúa brotando nuevos tallos. Por lo que es ideal.